"París, años 30. Joyce le dicta a Beckett su work in progress, que será "Finnegan's Wake". En algún momento llaman a la puerta, Becket no lo oye y Joyce dice: "Come in". Al final de la jornada de trabajo, el secretario lee en voz alte el dictado del día. Al llegar al "come in", Joyce se sobresalta. "¿Y eso?". "Usted lo dijo". Tras un momento de reflexión, el autor decide: "Dejémoslo..."
- Richard Ellman, "James Joyce", Londres, 1959 -